martes, 12 de enero de 2016

Por quién doblan las campanas, Ernest Hemingway

Hoy empiezo a leer esta famosa novela de Ernest Hemingway y lo primero que he encontrado me encanta:

“Nadie es una isla, completo en sí mismo; cada hombre es un pedazo del continente, una parte de la tierra; si el mar se lleva una porción de tierra, toda Europa queda disminuida, como si fuera un promontorio, o la casa de uno de tus amigos, o la tuya propia; la muerte de cualquier hombre me disminuye, porque estoy ligado a la humanidad; y por consiguiente, nunca hagas preguntar por quién doblan las campanas; doblan por ti.”
John Donne .

domingo, 10 de enero de 2016

Cosas del idioma

El tema da para mucho, para ensayos, conferencias, para genialidades, pero yo, sólo traigo esto, como muestra de que…

Seguramente hay mucho que decir de nuestra lengua el Español pero lo cierto, lo veamos por donde lo veamos, es que es una maravilla.
Pienso en las salidas, amparo y complicidad que brinda a los artesanos de la palabra, desde los más serios e ilustres, hasta los más bausanes como su servidor.
Esto viene por el hecho de haber visto una calcomanía en el parachoques de un carro que decía "Si crees que conduzco mal, tócame el pito".
En Honduras, el pito es el claxon, pero la mayoría entiende que también se refiere al órgano genital masculino. Y frases con doble sentido, son posibles gracias a la amplitud y riqueza de nuestro idioma.
El mensaje que vi en el parachoques me recordó una frase que le dije a una amiga una vez: Si siente que la vida se te hace polvo, ¡Gózala!

Cosas del idioma, como decían en Bienvenidos.
 

jueves, 7 de enero de 2016

Ama al hermano y es como un amigo

Esto también podria llamarlo "nada personal".
Me asombran, me dan pena, me incomodan, esas personas que claman a los cuatro vientos en las redes sociales por un amigo que sea como un hermano pero no hacen nada por ser verdaderos amigos de sus hermanos. ¡Hipocritas! Candil de la calle, oscuridad de la casa.

martes, 2 de septiembre de 2014

Himno a la Granadera

Ya se ve, Patria mía, en tu oriente
Nuevo sol esparcir claridad,
Ya podemos con vez reverente
Pronunciar: Dios, Unión, Libertad.

Cambiarán ya tu vida y tu suerte,
Un solo hombre tus hijos serán
Ya entre ellos no habrá guerra o muerte
Y dichosos tu bien labrarán.

Ya podrás alcanzar pura gloria,
De tus próceres sueño tenaz
Y el laurel de tu esplendida historia
Sera signo de triunfo y de paz.

¡Salve, Patria! Tu hermosa bandera
Luce al viento, del cielo el color
A su sombra juramos doquiera
A vencer o morir por tu honor.

—Rómulo E. Durón